Fue cl COVID, han sido miles de cosas y ahora mismo está siendo la DANA, sobre todo en Valencia. Así es como se aprovechan los medios de las tragedias.
Los medios de comunicación suelen abordar las tragedias con estrategias que buscan captar la mayor atención del público, a veces priorizando el impacto emocional sobre la profundidad informativa. Aquí algunos puntos clave de cómo se aprovechan de estos eventos:
- Titulares Sensacionalistas: Usan titulares impactantes o alarmantes que maximizan el horror o la tristeza de la tragedia. Esto atrae a la audiencia, aumentando clics y visualizaciones.
- Ciclo de Cobertura Continua: Durante una tragedia, los medios pueden realizar una cobertura 24/7. Esto responde a la demanda de información constante, pero también satura a la audiencia y aumenta el miedo o la tristeza en la población.
- Énfasis en Historias Personales: Los medios destacan historias individuales dentro de la tragedia para humanizar el evento, generando más empatía y atracción emocional. Si bien esto puede sensibilizar a la audiencia, también puede ser explotador cuando se da de manera invasiva o insensible hacia los afectados.
- Repetición de Imágenes Impactantes: Usan imágenes y videos de la tragedia repetidamente, incluso cuando son gráficos o perturbadores, lo que intensifica la reacción emocional.
- Plataformas Digitales y Redes Sociales: Con el auge de internet y redes sociales, la cobertura de tragedias se ha vuelto más viral. Al intensificar el impacto, obtienen más «me gusta», compartidos, y comentarios, lo cual aumenta la exposición y las ganancias publicitarias.
- Especialistas y Opiniones Variadas: Llenan horas de programación invitando a especialistas, quienes pueden no tener conocimientos directos sobre la tragedia pero llenan tiempo en pantalla. Esto alimenta la percepción de que se está recibiendo “análisis experto”.
- Mercantilización del Dolor: En algunos casos, la tragedia se convierte en un producto mediático donde la cobertura es diseñada como un espectáculo que genera altas ganancias publicitarias.
Esta tendencia de los medios a maximizar las audiencias aprovechando tragedias ha generado un gran debate ético, pues aunque informan, también distorsionan y manipulan la percepción de los eventos, influenciando en el comportamiento de las personas y, en ocasiones, revictimizando a los afectados.
Así que con esta segunda entrada, después de la de viajar en septiembre, lo doy por zanjado por hoy, viernes 1 de noviembre de 2024.
Ya has visto tú también cómo se aprovechan los medios de las tragedias, lo siguen haciendo y, tristemente, es lago que nunca va a cesar. Besos, abrazos y salud para todos, que en estos tiempos es lo que más falta hace.