Si nos fijamos en animales voladores (e incluso en animales acuáticos) existe una relación directa entre tamaño y estilo de vuelo. En el aire los insectos aletean muchas veces, debido a su pequeño tamaño su régimen de vuelo ocasiona un flujo con un número de Reynolds bajo.
A medida que el tamaño del animal volador crece el aleteo se hace más ineficiente frente al planeo, esto sucede porque al aumentar el tamaño de las alas las turbulencias producidas por el aleteo hacen aumentar desproporcionadamente el número de Reynolds y el flujo de aire no se puede dirigir apropiadamente. De hecho las aves de gran tamaño como el cóndor:
o el albatros:
Tienden a planear más y aletear menos. De hecho, los aviones comerciales existentes tienen alas rígidas y han dejado atrás concepciones erróneas de los primeros tiempos de la aviación:
Esto era algo que al principio no estaba claro para los ingenieros como Otto Lilienthal (1848–1896) que inicialmente dedicaron tiempo a comprender en detalle el vuelo aleteante de los pájaros.
Hasta que finalmente se convencieron con el tamaño de un ser humano solo el planeo era eficiente. Aunque la idea no quedó clara y siguieron haciéndose intentos ineficientes de aleteo:
En cuanto a la velocidad máxima creo que los halcones que se dejan caer casi en caída libre alcanzan en esa situación las velocidades mayores observadas, pero aún así palidecen frente a los sistemas de propulsión modernos.
PD: las avestruces que pueden alcanzar los 2,75 m de altura y pesar 180 kg. No vuelan. En este sentido también quisiera mencionar el excelente comentario de Esteban Domínguez que menciona la extinta ave elefante (avestruz proviene de στρουθιοκάμηλος strouthiokámēlos ‘gorrión camello’), también menciona que el colibrí que es un pájaro muy pequeño aletea 52 veces por segundo y del tamaño de las alas: ¿Hay un límite para el tamaño corporal en las aves voladoras?
Y esto es todo por hoy, domingo 12 de marzo de 2023. En el caso de que te haya gustado, házmelo saber. ¡Besis!