Hi majos, hoy quiero contar lo que me pasó ayer cuando me fui a localizar sitios abandonados para grabar un VLOG de mi serie #LugaresAVLOGdonados.

Los que me sigan/sigáis en Instagram ya habréis visto algo en unas Stories que subí sobre lo que voy a contar ahora.

El caso es que ayer por la tarde me fui a buscar localizaciones (a localizar, vamos…) para grabar otro VLOG de la serie que empecé y de la cual llevo tanto tiempo sin retomar.

Bien, no sé ni cómo entré en lo que parecía un coto de caza (a pesar de no estar señalizado por ningún sitio). Me adentré con mi Ibiza por un camino que no era nada adecuado para dicho coche, por lo tanto y tras pasar varios tramos bastante chungos, decidí dar la vuelta para volver por si acaso se ponía peor el camino.

Como no había hueco para dar la vuelta, decidí andar un poco a ver si veía un lugar más amplio donde poder maniobrar. Al fina y tras andar varios cientos de metros más, encontré un camino que salía a mano derecha donde podía dar la vuelta perfectamente. Bajé del coche para verlo mejor y ya que estaba hice una foto para las Stories de IG de mi perfil.

Acto seguido me puse a hacer un vídeo para lo mismo cuando me giro y veo detrás de mi un pedazo de animal mirándome seriamente con sus cuernos y su respiración en aumento. No sé si era una vaca o el tiempo que tendría, pero sí tenía cuernos (como se puede ver en la imagen que encabeza el post).

Yo, al no saber muy bien qué animal era ni cuáles eran sus intenciones, nada más verlo me metí al coche y me fui. Nada más entrar vi que el animal ni se había movido, por lo que salí y me acerqué un poco a él pero esta vez ya sin grabarlo. Entonces me di cuenta de que simplemente era un animal del coto que estaba comiendo a sus anchas, y lo que más me llamó la atención, que a pesar de parecer un animal «salvaje» o peligroso, si tú no le haces el paripé ni le haces nada, lo mismo da que da lo mismo estar a su lado, pues no te va a «atacar».

Por esto pensé en las corridas de toros y lo que estos animales sufren antes de salir al ruedo. Esos verdugos que le hacen de todo para embravecerlo antes de salir y los individuos vestidos de payado que se hacen llamar «toreros»…

Por cierto, sé que van a venir muchos con la misma gilipollez de siempre para defender la tauromaquia. Con lo de que «si no es un toro bravo», o que «si no es un toro de lidia»… pues una cosa os digo, a mí eso me da absolutamente igual, no creo que tenga que importar la raza de un animal para matarlo porque sí, o criarlo con el único objetivo de matarlo delante de cuatro descerebrados que por cada estacada o banderillazo gritan…¡oooleee! y cuando el animal acaba muriendo desangrado, todos se levantan a aplaudir.

Ah, y al final no me dio tiempo a localizar para este nuevo VLOG que quiero hacer, por lo que volveré a ello pero eso sí, por otar zona.

Así que esto es todo por hoy. Esto es lo que me pasó  ayer a mí y cualquier día puede pasar a cualquiera (el hecho de ir por el monte y toparte con un mostrenco de estos…