DashCam KAWA 6D: Así es mi nueva cámara para el coche

Así es. Creo que ya comenté hace tiempo que quizás me iba a hacer con una cámara de estas. Dicho y hecho. Me he hecho con una DashCam KAWA 6D, que básicamente es una cámara para llevar en el coche siempre grabando.

DashCam KAWA 6D: Así es mi nueva cámara para el coche
Esta es la cámara en su foto principal de Amazon.

No es una cámara para sacar vídeos de vez en cuando o para hacer cosillas con ella. Es para (o por) seguridad. Está continuamente grabando y por eso mismo al llenarse la tarjeta de 128 GB clase 10 y que compré aparte, tiene el modo bucle que sobrescribe los primeros archivos con el material nuevo.

Todavía ando trasteando con ella y probado cosillas, por lo que aún me queda mucho por ver…

DashCam KAWA 6D, al detalle

De momento lo que llevo visto o probado de ella es que es muy sencilla de montar, usar y en principio no tiene una calidad sobresaliente pero es sí más que de sobra para un coche. Graba en calidad 2K como máximo (a 30 fps, no a 60 fps, si no ocuparía el doble) y lo bueno es que de noche se ve bastante bien. Lo malo puede ser la app, ya que puede parecer buena o que va bien pero no es así al 100%. Como digo, me queda mucho por probar pero de momento estoy muy contento con ella.

En mi caso solo la uso para viajes largos, pues no voy a estar conectándola cada vez que cojo el coche. Además una de las movidas para montarla es esconder bien los cables por dentro del salpicadero. Esto es lo que más pereza me daba y me da. Ali fin y al cabo, si lo dejas bien montado una vez hecho esto ya no tienes que preocuparte por el cómo quedará.

De momento llevo creo que más de media tarjeta de memoria de 128 GB llena con clips de prueba y ya he grabado varias cosas de otros conductores que son para llevarse las manos a la cabeza.

Además una cosa que me gusta bastante es que por la noche se ve bastante bien. Aunque haya poca iluminación no pasa nada, el software de la propia cámara (o firmware) se encarga de darle buena iluminación.

Otro punto a favor es que desde la app (que se conecta con la cámara vía WiFi), se puede manejar la misma y gestionar el contenido. He probado a pasar videos directamente de la cámara a mi iPhone y todo perfecto.

Desde dicha app se pueden configurar varias cosas o aspectos de la cámara, tales como la calidad (720p, 1080p y 1440p ó 2K), si graba audio o no y alguna cosilla básica mas.

Otro punto a favor es al la hora de guardarla o recogería. Solo hay que desenchufarla, dar un click a un “botón” que tiene para sacarla de la carcasa y a la funda.

No todo es perfecto (supongo)

Una de las cosas que no me gustan (pero que es normal en este tipo de cámaras) es que no puede estar enchufada pero “apagada”. Es decir, desde que se enchufa está grabando. Tiene un botón pero no es para apagarla o encenderla, es solo para la configuración inicial.

Se me olvidaba comentar el tiempo de grabación de los clips. Al estar siempre enchufada y no poder ser tú el que inicie o pare la grabación (a no ser que la desenchufes), desde la app se puede seleccionar un tiempo de entre tres que ofrece para cada clip que se van grabado continuamente y en bucle. Estos son tiempos de un minuto, dos minutos o tres minutos por clip.

Y, básicamente, esto es todo lo que puedo decir de esta cámara (por lo menos de momento). Así que espero seguir usándola en todos mis viajes e ir probando cosillas y funcionalidades que le vaya encontrando.

En fin, hamijos.. pasad un lindo miércoles 22 de mayo de 2024 que es el día de hoy y sed felices.

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